Z
Zaira
La comunicación no es tan solo un concepto que aparece mitificado en los anuncios de telefonía móvil, es el acto mismo que sostiene todo el edificio humano. Pero no es perfecta, cualquiera que sea la forma que adopte, y aquí trataré de recoger y explicar algunas de las barreras que pueden enturbiar o impedir la comunicación.
Superación de las barreras.
- Filtración: Es la manipulación deliberada de la información. No es exactamente mentir, sino omitir cierta información o darle preponderancia a otra, con fines de beneficio personal, normalmente.
- Percepción selectiva: El receptor, selectivamente, ve y escucha las comunicaciones dependiendo de sus necesidades, motivaciones, experiencias, antecedentes u otras características personales. No se ve o escucha la realidad, sino que interpretamos lo que vemos o escuchamos dependiendo de cómo estemos y lo llamamos realidad. La prensa diaria está llena de ejemplos de este tipo, y del anterior también, por desgracia.
- Emociones: La manera cómo se siente el receptor al recibir un mensaje, o el emisor al transmitirlo, influye en la forma en que se lo interpreta. Con frecuencia se puede interpretar un mismo mensaje de diferentes maneras, dependiendo del estado anímico, de si estamos contentos o preocupados, etc. Las emociones extremas pueden hacer casi imposible una comunicación efectiva.
- Cultura nacional: Es una variante del anterior punto, que merece ser tratado aparte por su importancia. La comunicación interpersonal no se conduce de la misma manera en todo el planeta. Según el país o la región se le da mayor importancia a distintos aspectos relacionados con la transmisión de mensajes.
- Diferencia de jerarquía: Las diferencias verticales u horizontales dentro de una organización puede crear barreras. La diferencia horizontal crea especialistas que desarrolan su propio lenguaje. La diferencia vertical también crea problemas evidentes de entendimiento mutuo.
- Lenguaje no-verbal: Nuestro cuerpo se comunica también. Cuando lo que dice el cuerpo no se corresponde con lo que dice la voz, el receptor se confunde y la claridad del mensaje disminuye.
- Ambientales: Éstas son las que nos rodean continuamente. Son impersonales y pueden tener un efecto negativo en la comunicación. Puede ser incomodidad física (calor en la sala, una silla incómoda), distracciones visuales (una mosca volando), interrupciones (las lentejas se están quemando en la cocina), ruidos (camiones en la calle, alguien tosiendo), etc.
- Verbales: Formas de hablar que dificultan la información, por ejemplo personas que hablan muy rápido, o que no explican bien las cosas. En las personas que hablan otro idioma la barrera es obvia, pero incluso a veces nuestro propio idioma resulta incomprensible, para nosotros mismos, ya sea por diferencia de edad, clases sociales, nivel de educación e incluso entre dos profesionales, de distinta especialidad, como un médico al que le cuesta hablar de temas medicinales con un ingeniero.
- Interpersonales: Es el asunto entre dos personas, que tiene un efecto negativo en la comunicación mutua. Estas barreras interpersonales sobrevienen cuando dos personas no se llevan bien, por ejemplo, pero hay más variantes, y más complejas.
- Suposiciones: Es algo que se da por sobreentendido. Si la suposición no es acertada, será una clara barrera en la comunicación.
- Percepciones: Es lo que uno ve y oye, nuestro punto de vista, o sea que dos personas pueden percibir un mismo tema y darle distinto significado. Es inevitable que tengamos nuestro punto de vista, pero cuando lo damos por universal nos cerramos a otras perspectivas.
- Defensa: Cuando la gente se siente amenazada, tiende a reaccionar en formas que reducen su habilidad para lograr el entendimiento mutuo. Se vuelve defensiva, se compromete en atacar verbalmente a los otros, hacer comentarios sarcásticos, ser excesivamente prejuicioso y cuestionar sistemáticamente los motivos de los demás. Así, cuando los individuos interpretan el mensaje de los demás como una amenaza, pueden responder de forma que empeora la comunicación eficaz.
Superación de las barreras.
- Empleo de la retroalimentación: muchos problemas de comunicación pueden atribuirse directamente a malos entendimientos o inexactitudes. Esto se puede evitar si el receptor y el emisor emplean la aclaración de la información para comunicarse.
- Implicación del lenguaje: Los comunicantes deben escoger las palabras y estructuras para sus mensajes de la manera más clara posible, para que estos sean comprendidos por el receptor. Se debe escoger el lenguaje de acuerdo con las características del receptor, en cuanto a edad, cultura, educación, etc.
- Escuchar activamente: Escuchar es una búsqueda activa de significados, que no es lo mismo que oír. Cuando alguien nos habla siempre le oímos, pero no quiere decir que le estemos escuchando. Escuchar activamente es el esfuerzo físico y mental de querer captar con atención la totalidad del mensaje que se emite, tratando de interpretar el significado correcto del mismo, a través del comunicado verbal y no-verbal que realiza el emisor e indicándole mediante la retroalimentación lo que creemos que no hemos entendido.
- Restringir las emociones: Sería ingenuo suponer que la gente se comunica de manera totalmente racional. Sabemos que las emociones pueden velar y distorsionar gravemente la transferencia de significados. La solución sería frenar la comunicación hasta recuperar el pleno control de nuestras emociones, o pedirle al otro que tenga en cuenta el hecho.
- Vigile el lenguaje corporal: Si los hechos dicen más que las palabras, entonces es importante controlar nuestros gestos para que sean acordes con nuestras palabras y las refuercen.